Las hormonas de Amenofis

Buscando unas cosillas sobre Isaac Asimov en la web, me he encontrado con una serie de información de la que no tenía ni la más remota idea:

  • Era claustrofílico, vamos, que le gustaba estar en lugares cerrados.
  • Apoyó el uso civil de la energía nuclear.
  • Tenía un montón de doctorados honoris causa.

Hay mucho que decir y que comentar sobre Asimov, pero como casi todo está dicho en internet, me planto: no voy a escribir lo que uno puede encontrar con Google. Ni tampoco voy a hacer una reseña ni un ensayo de opinión, no, nada de eso. Simplemente, me gusta. Es uno de los autores de ciencia-ficción más conocidos y leídos, así que seguro que si estás leyendo esto, ya ha pasado por tus manos alguna novela de él.

Además de las novelas publicó muchas obras –muchas, muchísimas, ¿cómo le daría tiempo?– de divulgación científica y otras de divulgación histórica, que son más bien historia de la política y demás batallitas que otra cosa, pero a la lectura de estos libricos tengo que agradecer el haberme enterado de más de un incidente histórico que no voy a confesar, no vaya a ser que me vengáis con lo de «¡¡¡pedazo de ijjjnorante!!!, ¿¿¿pero que no sabías eso???» Pues no, mirusté. Bueno, a lo que iba. Los libros de historia de Asimov, los puedes encontrar en cualquier librería mediana, Alianza los acaba de volver a sacar en la edición económica, con unas portadas horrorosas –lanzo la pregunta: ¿soy el único que piensa que esta editorial la ha cagado renovando la colección de bolsillo?–, pero bien de precio, a unos siete leurines de nada, que son una buena inversión, teniendo en cuenta los saberes que proporciona, que tampoco son muchos pero que quitan unas cuantas telarañas de esos rincones tipo “literatura española del XVIII” o “historia europea del siglo IX”. Ya sé que muchos dirán que son una basura y que para eso nos pongamos con libros serios. Pues sí, puede ser, pero para el que quiere ahorrar tiempo y no encuentra novelas tipo Sinuhé en las que instruirse sobre los quebraderos de cabeza de Amenofis IV con sus problemas endocrinos y con las que despejar nuestras dudas fundamentales sobre la política exterior de Egipto durante la Dinastía XVIII –conocimientos imprescindibles para poder dormir sin remordimientos de conciencia, por otra parte–, pues oigamé, también sirve, que yo mismamente –que se dice ahora– no necesito saber más. Eso sí, que nadie me vuelva a acusar de que no sé si fueron los amorreos o los hurritas los fundadores de Mitanni, que ahora no sabría decirlo, pero, por lo menos, sé que existieron estos chatorros, que eran bastante guarros y tenían muy mala leche –sobre todo si eras hitita o casita, que no es que me haya dado por el Monopoly, es que había unos que se llamaban así, los pobres–, que supongo que para algo servirá, además de para hacer crucigramas.

Oye, que son entretenidos esos libros. Y punto.

Comentarios

  1. Aunque no tenga mucho (nada) que ver con la noticia, querría hacerle una pregunta señor Omanero:
    ¿Existiría la posibilidad de que generase los feeds con las noticias completas?. Lo digo porque los que le leemos desde un agregador nos vemos en la incomodidad de tener que acceder al blog en los artículos de cierta longitud. Y aunque este le ha quedado muy bonito, no queda del todo bien en la pantalla de la oficina 😛

  2. Ahora viene cuando te digo: ¡Ja! ¡Pecador! ¿Leyendo blogs en el curro, eing?
    Bueno, lo de los feeds es una cuestión peliaguda con la nueva versión de WordPress, pero como nadie había dicho na, pues callado que estaba. Bueno, que he instalado el plugin y que empezará a funcionar cuando ponga otro post, que hasta ahora se cortaba cuando ponía un «Continúa».
    Gràsies.

  3. In I Go

    Que tú quieres que yo te diga de Asimov, mi amorl. He is one of my favourites. No sé como decirlo. Me gusta más que Joyce. Ay, ay, ay.

  4. ¡Toma! Y a mí, ¡nos ha jodío! 😀

  5. sonia

    ¡¡¡holaaaaa!!!, ya he vuelto y me he encontrado con la grata sorpresa se unos libros de asimov que no conocía. Pues apuntados a mi lista de libros interesantes.
    Por cierto, muy bueno el comentario en la barra de enviar comentarios, eres un crack!

  6. In I Go

    Me he leido sus fundaciones, sus robotes y demás science fiction varias veces. Me siento Hari Seldon, Elijah Baley y Golan Trevize. Estoy enamorado de Gladia y de Biss. Y el cabrón de él me dejó intrigado con la definición de Fallom: hermafrodita, transductora, diferente.
    Otra que me dejó tocado fue ‘El fin de la eternidad’.
    De los libros de historia, poco. Creo que leí uno, pero ya no me acuerdo cuál.

  7. Gracias a ti por facilitarme la lectura 😉
    Respecto a Asimov quería comentar que me parece un autor de nivel muy variable.
    La trilogía de fundación está chula (sí, la trilogía, esos otros dos libros no existen), así como la mayor parte de sus cuentos.
    Sin embargo flojea bastante a menudo, tanto en cuentos como en novelas. Aunque teniendo en cuenta el volumen de su obra tampoco debería ser algo a echarle en cara: tiene más obras buenas que la mayor parte de escritores.
    Luego ya está el tema de si uno prefiere las space-opera o la ciencia ficción «hard». Pero vamos, eso es entrar aún más en los gustos personales…

  8. Javier

    ———
    He is one of my favourites
    ———
    «This is one of my favourites» lo decía George Michael al inicio de su versión de Somebody to Love 🙂
    ———
    Es uno de los autores de ciencia-ficción más conocidos y leídos
    ———
    «One of the Big Three», como recoge la Wikipedia. Es curioso que la «pre-cuela» a la Fundación la escribieran «las tres Bes». Por cierto, alguno de ellos trataba el tema de la educación. Bastante humorísticamente 🙂
    ———
    Me gusta más que Joyce.
    ———
    ¿Aquí se puede hablar de eso? A mí una vez se me ocurrió decir que por muy interesante que sea para los críticos (que no supieron que era un test para ellos hasta que el propio Joyce lo dijo), para nosotros lectores humanos es difícil leer frases a las que les falta a veces el sujeto, a veces el predicado, y a veces ambas cosas. Y me cayó encima lo que no está escrito.
    Parece que aquí la gente es humana. Yo también tengo a mérito haber aguantado Ulises hasta el final, sólo por poder hablar luego con conocimiento de causa 🙂
    ———
    historia europea del siglo IX
    ———
    Hace poco comenté algo por ahí de una película sobre Arturo, al estilo de «cómo me cambian la historia, siglos atrás en el tiempo, ni Leonor de Aquitania ni nada de eso» y el comentario más en línea que obtuve fue «pero eso fue mucho después, ¿no?». Esas cosas le llevan a uno a cuestionarse si sabe transmitir información o qué 😛 Para no llevar a engaño, aclaro que yo de Historia ni pum. Ignaro total.
    ———
    Amenofis IV con sus problemas endocrinos
    ———
    Asimov en persona tuvo problemas endocrinos, le tuvieron que extirpar… ¿el bazo, el páncreas? Es normal que le llamaran la atención esas cosas, me imagino. Aparte, hay toda una teoría que relaciona grandes catástrofes mundiales con las pejigueras de los líderes. De que Hitler tuviera entre ceja y ceja que quería la lanza de Longinos, no veas la de cosas que ha implicado eso. La trayectoria de los submarinos alemanes por el Atlántico estaba prefijada por conjunciones astrales, me parece. Herbert Gronemeyer sale en Das Boot, a todo esto.
    Seguro que tendría su cierta importancia que un faraón tuviera o no problemas endocrinos 🙂
    -javier

  9. Pues claro que tenía su importancia, de hecho, algún investigador habrá que esté viviendo de las dificultades endocrinas de Akhenatón. En la Wikipedia afirman que puede que fuera hermafrodita o padeciera el Síndrome de Marfan:
    Marfan syndrome is a genetic autosomal dominant disorder of the connective tissue characterized by unusually long limbs, great stature or long toes or fingers in proportion to height. The disease may also affect numerous other structures and organs — including the lungs, eyes, heart, blood vessels, dural sac surrounding the spinal cord, and hard palate. It is named after Antoine Marfan, the French pediatrician who first described it in 1896.
    Hablando de hermafroditas, In I Go, me quedo con Dua o con la bruja de la doctora Calvin, que por muy plana que sea, despierta en mí sentimientos encontrados, que dirían.
    Yago, lo de la ci-fi «hard» y compañía, podemos discutir largo y tendido, porque pa mí casi toda la «hard» es «cosmowestern» –que me mola más que lo de «space-opera», suena más añejo–, incluso el ciberpink no deja de ser un tecnowestern. Y dios nos pille confesaos con lo que acabo de decir. Algún día abriremos la caja de los truenos. De todas formas, sí es muy irregular, incluso tiene alguna cagada importante, como las de Lucky Starr, que son un bodrio importante.
    ¡Ah!, que aquí se puede decir que Joyce es un coñazo, que no pasa nada.
    Sonia: Bienvenida otra vez al mundo de los ciberconectados.

  10. In I Go

    No he leído Los propios dioses, pero me acuerdo de la doctora Susan Calvin de US Robotics.
    Fallom no tiene mucho protagonismo, salvo un par de reacciones histéricas, hasta que coge confianza (Bliss, ay Bliss). Sin embargo, con esa frase, Asimov dice que será la que rija los destinos del Universo. Eso es lo que me dejó intrigado. El futuro que nunca llegó.

  11. Javier

    ——–
    o con la bruja de la doctora Calvin, que por muy plana que sea
    ——–
    «Yo Robot» acaba con la necrológica. Empieza presentando al personaje, cuando era niña con inquietudes. Produce una sensación… artística, diría yo. Como cuando acaba «El Señor de los Anillos» diciendo Sam «Bueno, ya estoy de vuelta». Necesitas más. A mí me entró melancolía al leer el Apéndice sobre cómo se queda viuda Undómiel. Uno necesita más, pero _no_eso_!!!!
    Recuerdo ahora «Mentiroso» (de Yo Robot). Es un tema que me gusta por diversos motivos: la inteligencia no tiene por qué estar peleada con lo social, y además se puede considerar el primer relato «telepático» que luego enlazaría con la saga de los robots.
    Hablando de niñas con inquietudes, hace poco propuse por ahí una adivinanza sobre un artículo reciente de Pérez Reverte y llegué a la conclusión de que casi nadie parece haber leído la contraportada (o era la solapa?) del primer volumen del Alatriste. El tamborilero, que le decía Javier Marías 🙂
    ——–
    Yago, lo de la ci-fi “hard” y compañía, podemos discutir largo y tendido, porque pa mí casi toda la “hard” es “cosmowestern”
    ——–
    Vaya, Asimov en persona decía «La nave derrapó dejando varios parsecs de estela… Ustedes no leen novelas así porque para eso están los editores»
    Las tres Bés (no los hermanos Gibb, sino ver aquí en Other Authors) son considerados ci-fi de lo más hard. Ahora no recuerdo cuál de ellos era el que humorizaba acerca de las pruebas de acceso a universidad, o a la financiación de los proyectos de investigación, pero creo que eso no era ci-fi, sino comentarios contemporáneos.
    ——–
    edición económica, con unas portadas horrorosas
    ——–
    Por terminar relacionándolo todo, para portadas horrorosas las de esta colección, de la que destaco este volumen porque es el libro que más lamento haber «perdido» (y eso que he prestado inocentemente a lo largo de mi vida).
    Louis Sacchetti se vuelve inteligente… y se dedica a leer el periódico 😛 Son los libros que uno compra por aburrimiento en una fiesta del libro de vacaciones en la playa, y no espera encontrar esa calidad bajo una portada tan infame.
    Perdón por la extensión!
    -javier

  12. Javier

    Hmm, aprovechando que leéis ci-fi… ¿soy yo que me confundo, o la vida de Ursula K. LeGuin ha cambiado como 200 veces? Es que debo haber leído como 200 veces «este libro me ha cambiado la vida» firmado: Ursula.
    http://www.fantasticfiction.co.uk/d/thomas-m-disch/camp-concentration.htm

    Thomas M. Disch is one of the overlooked masters of science fiction, and Camp Concentration is one of his finest novels. The unlikely hero of this piece is Louis Sacchetti, an overweight poet who’s serving a five- year prison term for being a «conchie»,

    Recordaba bien cómo se escribía Sacchetti, en el enlace de antes venía mal escrito. Me apunto también al concepto de que Disch es un «overlooked master», o al menos que esta novela debería ser más conocida, como «And madly teach» de Biggle.
    Me pasa también últimamente que encuentro de dónde han copiado tal o cual cosa
    http://www.amazon.com/gp/product/0375705457

    Disch’s verbal abilities and his mental dexterity are commendable, and are well displayed here. He is less successful at constructing plot intricacies, character development, and dramatic structure. Though it ties in with the plot, Disch’s Pynchonesque linguistic display, which reaches a crescendo in the early part of Book Two, come off as the product of a young writer having fun with a highlighter and an unabridged OED.
    It’s interesting that this novel was published about half a year after Daniel Keyes came out with a very similar book

    No entiendo «dexterity», ni Pinchonesque, highlighter no creo que sea un «mechero muy bueno», OED no lo capto, pero discrepo en lo de «plot intricacies» etc. El argumento es brillantemente auto-consistente. Flores para Algernón también lo leí (prestado) y coincido en que el concepto es parecido.
    Como en «Pum» se confiesan ahora lecturas juveniles, la primera novela que yo leí jamás fue… no podía ser de otra forma, «20.000 leguas de viaje submarino», de Julio Verne, en edición de regalo de una conocida pasta de dientes 😀 He estado buscando el dibujo para mostrarlo aquí, pero no lo encuentro. ¡Bastante me sorprendió encontrar la portada del de Disch! 🙂

  13. Javier

    Oh, cielos, lo que encuentra uno buscando
    http://home.earthlink.net/~sweetwind7/thyca/asimov.html
    http://www.locusmag.com/2002/Issue04/Letter.html
    Era el tiroides lo que se tuvo que extirpar Asimov, la operación era en la garganta. Me sonaba justamente de leer «La tragedia de la luna». La escena en las enfermeras intentan evitar que Asimov les toque el culo mientras empujan la camilla hacia el quirófano y él grita «cirujano, cirujano, la garganta córtame» es para no olvidarla. Efectos de la anestesia, que decía él.
    Primero busqué «asimov surgery» y luego añadí «hormone» porque recordaba que tuvo que tomar suplementos el resto de su vida. Coincido con esta chica, Linda, en que lo que se estaba protegiendo era más bien la reputación del médico… o del hospital y el sistema de transfusiones.
    :L

  14. franche

    creo q´ es super bakan esta pagina pa´cuando uno esta aburrido y tiene algo q´leer:)) K:D 😀 /guiño/ 🙁 🙂 K:D /humo/ /estrella/ :L 😡 =? bostezo:/ :. :B /:) 😐 :)) :,,,(( :S :O :* 😛

  15. […] viendo entre las tinieblas del sopor una adaptación más que libre del Hombre Bicentenario de Asimov, un bodrio, ya lo sé, pero es que en esos momentos acababa yo de contribuir a mi mala salud con […]

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