Escribo esto un poco más tranquilo porque no quiero que este blog se convierta en una narración de mis desventuras con la justicia. Únicamente quiero decir al respecto que el hecho de aceptar la presunción de inocencia del denunciado no implica que el denunciante sea un delincuente. Porque así fue como me sentí ayer después de declarar ante el juez de instrucción del Juzgado nº 21 de Valencia. ¿Cuántas veces insistió en el tema de que es un delito decir falso testimonio? ¿Cuántas veces me preguntó si estaba seguro de que yo no había salido del coche para insultar al que me golpeó? Hay gente que me conoce que dice que la mala uva se me ve en la cara antes de que yo abra la boca. Pues digo yo que se tuvo que dar cuenta de que se estaba pasando de rato largo con las preguntas, lo percibí claramente. Además, supongo que el denunciado habrá declarado que fui yo el que le golpeó a él. En fin. Que se va a quedar en juicio de faltas y que voy a tener que ir al forense otra vez porque se han iniciado dos procesos diferentes –uno en Paterna y otro en Valencia–, así que voy a tener que perder otra mañana. Y con esto acabo porque se me llevan los demonios, que dicen por ahí.
A otra cosa. He leído en EL PAÍS que el precio de la vivienda en Valencia ciudad ha subido un 253% en cinco años. En Madrid, un 138% y en Barcelona, 170%. Así que ahora, el metro cuadrado cuesta una media de 3.800 € del ala en la ciudad de la ribera del Turia. En el barrio de L’Eixample cuesta 7.956 € y en Ciutat Vella, 7.289 €. Las causas de la subida parece que son: el AVE, la Copa América, la falta de suelo y el aumento de la población. Bueno, me da igual por lo que sea. Si la inflación sube un 3,5% al año, ¿qué precios son los que bajan para compensar esto? ¿O es que la vivienda no entra en el cálculo del IPC? ¿Será que en otros lugares ha bajado y yo sin enterarme? No sé cómo funciona el cálculo del IPC, la verdad es que, por mucho que lo expliquen en la televisión, nunca lo he acabado de entender. Yo suponía que se tomaban los datos de ciertos productos comprados en diferentes comercios, se saca la media y después se comparan los datos con muestras anteriores, ¿no? Si es así y la vivienda ha subido un 253% en Valencia ciudad, ¿cómo es posible que suban los precios úncamente un 3, 5%? No lo entiendo. Una solución quiero.
Más. Desde el último incidente con pedos que no eran los míos teniendo en cuenta que últimamente tengo que soportar que a Manolito le sienten fatal las legumbres –hago una llamada desde aquí a los escépticos que quieran comprobar el estado de la cuestión–, he decidido convocar el PRIMER CERTAMEN CREATIVO DE GASES DE LA COMUNIDAD HISPANOAMERICANA. Disculpen lo escatológico de la convocatoria, pero a la vista de que lo natural es bello, sano y recomendable, he llegado a la conclusión de que estamos muy atrasados en el estudio y análisis de estas actividades. Ya tuve mis discusiones cuando vivía en Alemania sobre la conveniencia o no de ser natural ante estas pOblemáticas fisiológicas y, aunque tenía en cuenta aquello de «allá donde fueres, haz lo que vieres», no conseguí acostumbrarme a que al gas natural hay que darle un provecho, igual que a lo del ahorro de agua en higiene personal y de la vivienda en general. Pero como tenemos que europeizar nuestras costumbres y Alemania es el motor de Europa, considero que tenemos que actualizar nuestro archivo COSTUMBRES SOCIALES v. 3.0 y dejar a nuestro cuerpo la libertad total que requiere. Ya sEmos europeos, ya se encargan de recordárnoslo todos los días.
Estoy harto de escuchar la cantinela de que tenemos que ser más europeos. Pues oiga, no. Hasta aquí hemos llegado. Que tenemos que trabajar con los mismos horarios que en Hamburgo, pues mirusté, denos el mismo sueldo y las mismas condiciones de trabajo que allí y yo vendré a trabajar a la hora que usté me diga. ¿Leemos poco? Pues sí, mirusté. Baje el precio de los libros y verá cómo compramos más. ¿Conducimos fatal? Pues sí, mirusté. Construyan carreteras como Dios manda, eliminen los puntos negros, hagan pruebas de verdad para los candidatos a la consecución del permiso de conducir, conecten de una vez Valencia con Madrid con un tren directo –y no vía Albacete, como en estos momentos– y dejen de echar la culpa de todo a los conductores. ¿No separamos la basura? Pues mirusté, me ponga contenedores en cada esquina, fáciles de abrir y cerca de cada casa y después hablamos. ¿Los jóvenes no se emancipan? Pues no, no se emancipan. Con los alquileres que hay por ahí y los sueldos que cobramos, nadie lo tiene fácil. ¿Las españolas tienen pocos hijos? Pero, ¿cómo van a tenerlos si las despiden de sus trabajos gracias a las leyes éstas que tenemos? Y más cosas que no tengo ganas de mentar. Todos los días nos dicen bien claro que los españoles estamos por detrás con respecto a los europeos. Cualquier día de estos dejo de leer el diario, paso de las estadísticas de los programas de noticias de la televisión y me paso del diario al Hola, a despiporrarme con el encanto de la alta sociedad, a la los españolitos de a pie les consentimos que no paguen impuestos, como la familia de Franco, y encima les pagamos para que hagan el chorra bailando un vals en la televisión pública.
Y ya termino. He estado leyendo los comentarios y opiniones que habéis dejado en Blogissimo y me he sonrojado del todo. Mil gracias a todo el mundo.
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