La gente puede decir idioteces muy grandes. Pero cuando se trata de asuntos que son difícilmente criticables, la estupidez alcanza unas cuotas insuperables.
Hoy, la AEMET ha emitido una alerta roja en Madrid por lluvias muy intensas y ha recomendado a la población que se quede en sus casas, a ser posible. Este mensaje ha llegado por móvil a todos los dispositivos que se encontraban en Madrid y ha emitido un sonido de alerta. La ciudadanía ha protestado porque:
- Qué susto, un móvil vibrando y pitando. Inaudito (cuánta razón, ¿qué se habrán creído?, ¿un móvil pitando y emitiendo notificaciones?).
- Qué inconsciencia, si ese aviso se llega a enviar a la gente en un estadio, podría haber pasado una desgracia (por ejemplo, que los móviles de 40.000 personas hayan sonado a la vez, hayan entrado en resonancia y les haya reventado los tímpanos a todos).
- Qué ilegalidad, usando mis datos personales (esos que mantienes a buen recaudo y que no das a nadie cuando usas otras apps en tu móvil).
- Qué inconsciencia, esas alertas están para lo verdaderamente importante (como una buena bomba nuclear, un ataque zombi o que se haya muerto María Teresa Campos).
No sé qué se habrán creído estos de la AEMET para enviar una alerta así a lo loco. Total, 100 litros de agua por metro cuadrado en 2 horas es una tontería.